La Organización Mundial de la Salud (OMS) decidió hoy mantener la pandemia de COVID-19 como una emergencia sanitaria internacional ante las incertidumbres que persisten, en particular la relativa a la evolución del virus, que podría mutar para ser más peligroso y evadir la inmunidad.
“Aunque es obvio que la situación global ha mejorado desde que empezó la pandemia, el virus sigue cambiando y siguen habiendo incertidumbre y muchos riesgos”, declaró a la prensa el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Esta decisión fue recomendada por un grupo internacional de expertos que forman el Comité de Emergencia de la OMS, responsable de evaluar cada tres meses si la propagación de una enfermedad constituye una amenaza para la salud pública internacional.
Con información de EFE