Una adolescente de Florida que luchó contra un tiburón en una playa de la costa Atlántica del estado, donde suelen reportarse a menudo ataques de escualos, se recupera de las heridas sufridas y afirma que “planea volver al agua”.
Ella Reed, de 15 años, estaba sentada el pasado jueves en aguas poco profundas conversando con una amiga en Fort Pierce Beach, unos 200 km al norte de Miami, cuando de repente sintió un dolor agudo en el costado y vio que un tiburón la estaba atacando.
“No me dejaba en paz, así que tuve que usar mi brazo y usar mi mano también, por lo que (el tiburón) agarró mi brazo y mi dedo”, dijo la adolescente en una entrevista.
Reed, que se encuentra en su casa recuperándose tras recibir 19 puntos de sutura, cree que fue mordida por un tiburón toro de entre un metro y medio y 1.82 metros.
La cadena mostró imágenes de la adolescente donde se observan mordidas del tiburón en el vientre, un brazo, un dedo y la parte superior de una rodilla.
“Estaba un poco conmocionada por todo lo que sucedió, así que no tenía mucho dolor porque la adrenalina estaba por las nubes”, señaló la adolescente en una entrevista junto a su madre.
La adolescente comentó que nunca le ha tenido miedo al océano e incluso después de este encuentro planea “volver al agua”.
Dijo estar consciente de que el ataque pudo “haber sido mucho peor”.
El último informe anual del Archivo Internacional de Ataques de Tiburones (ISAF, en inglés) de la Universidad de Florida (UF), señala que Estados Unidos es el país donde se registraron el año pasado más ataques no provocados de tiburones (43) y Florida el estado con más casos (17).
Los 57 ataques no provocados de tiburones a humanos registrados en 2022 en todo el mundo son la cifra más baja de la década.
Con información de EFE