El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de Estados Unidos fletó desde El Paso (Texas, EE.UU.) con dirección a Honduras y Guatemala dos de los últimos vuelos con migrantes expulsados conforme al Título 42.
Dicha norma, vigente hasta la medianoche del jueves, permite devolver en caliente a personas por motivos de salud pública
A las 5:30 de la mañana tres autobuses blancos cargados con 116 migrantes hondureños esposados de pies y manos y con una cubrebocas tapándoles boca y nariz llegaron a una puerta lateral del aeropuerto internacional de El Paso.
A través de las ventanas, algunos saludaban a los periodistas convocados por las autoridades para ver su salida.
Todavía de noche, los tres vehículos entraron en el aeródromo en el momento en el que unos 130 guatemaltecos, también con esposas en pies y manos, salían de otros tres autobuses y subían la escalinata del avión que les devolverá a su país, donde lo dejaron todo para buscar una vida mejor.
Según una fuente del ICE, mañana está previsto que despegue el que podría ser el último vuelo desde El Paso con migrantes expulsados por motivos sanitarios, en este caso también guatemaltecos.
Todos fueron detenidos por la Patrulla Fronteriza y entregados a los agentes de ICE para ser enviados de vuelta a sus países de origen.
El regreso del Título 8, la normativa que regula la migración
Una vez que el Título 42 sea levantado, volverá a entrar en vigor plenamente el Título 8, por el que se habitualmente las autoridades estadounidenses se han regido para administrar las cuestiones de migración.
“La aplicación del Título 8 es algo que se ha hecho históricamente y claramente continuará”, apuntó el responsable de ICE, que pidió que su identidad no fuera desvelada.
Un responsable de ICE aseguró que a nivel nacional son fletados hasta 66 vuelos semanales, sobre todo a Guatemala, Honduras, El Salvador, Colombia, Ecuador, Perú y el Caribe.
La fuente precisó que la repatriación de migrantes venezolanos se hace en grupos más pequeños, sin ofrecer mas detalles.
Asimismo, apuntó que los vuelos de ICE suelen despegar con más asiduidad de otras dos localidades de Texas: Arlington y San Antonio, además de desde los estados de Florida, Arizona y Luisana.
La confusión continúa en el centro de El Paso
Mientras las autoridades migratorias siguen deteniendo y expulsando personas indocumentadas, en el centro de El Paso, continúa la confusión entre las pocas decenas de migrantes que todavía permanecen acampados junto a la Iglesia del Sagrado Corazón, después de que la gran mayoría decidiera ayer entregarse o continuar su camino hacia el norte del país.
Los indocumentados que quedan allí se preguntan si entregarse a las autoridades o no y se debaten entre la esperanza de conseguir una cita judicial dentro de Estados Unidos para que determine su caso o ser detenidos y enviados de vuelta a su nación.
Muchos de los que se entregaron consiguieron registrarse oficialmente para comenzar su proceso de asilo, mientras que otros siguen detenidos sin saber todavía qué futuro les espera.
Las informaciones contradictorias, los rumores y el nerviosismo se extendieron en los últimos días entre las personas llegadas a El Paso, en su mayoría venezolanos, que esperan en el centro histórico de la localidad mientras toman una decisión.
Este mismo miércoles, el gobierno de Estados Unidos promulgó este miércoles una nueva norma que restringe el acceso al asilo en la frontera con México y sustituye al Título 42.
La norma, que se publicará hoy en el registro federal, califica como “no aptos” para solicitar asilo a los migrantes que crucen de manera irregular la frontera y que no hayan pedido protección en un tercer país durante su travesía hacia EE.UU, explicaron funcionarios del gobierno en una llamada con reporteros.
Hoy está prevista también la llegada a El Paso de los mil 500 militares de refuerzo que prometió el presidente de EE. UU., Joe Biden.
Un envío que ha desatado críticas tanto entre la oposición republicana, que lo considera insuficiente, como de algunos miembros del gobernante Partido Demócrata, que lo han calificado de excesivo.
El expresidente Donald Trump (2017-2021) bajo cuyo mandato se introdujo el Título 42, que vence la noche del jueves, se mostró hoy una vez más alarmista y aseguró que “cientos de miles de personas” entrarán en el país por “lugares desconocidos”.
Fiel a su discurso xenófono, Trump que acaba de ser encontrado culpable en un tribunal de Nueva York de abuso sexual, aseguró que muchas de esas personas provienen de prisiones y de instituciones mentales.
Los soldados que envía Biden no pueden obligar a cumplir las leyes, por lo que no podrán realizar expulsiones.
En los últimos días, el gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott también ha enviado fuerzas de seguridad suplementarias, incluidos helicópteros, y ha desplegado metros de alambre de espino para intentar evitar la entrada de personas de manera irregular.
Con información de EFE